B. LINENSE 2 - CÁDIZ 1

BUEN ARRANQUE, MAL DESARROLLO Y PÉSIMO FINAL

Imagen: Diario de Cádiz

B. LINENSE: Lolo Soler, Manu Martínez, Olmo, Carlos Guerra, Polaco, Ismael Chico, Fall (Migue Montes 84'), Juampe, Canario (Óscar Martín 65'), José Ramón y Copi (Alberto Merino 75').

CÁDIZ: Aulestia, Andrés Sánchez, Servando, Josete, Tomás, Garrido (Arregi 92'), Espinosa (Navarrete 77'), Migue García, Kike Márquez, Airam Cabrera y Jona (Kike López 68').

ÁRBITRO: López Puerta (madrileño). Amonestó a Carlos Guerra, Canario, Manu Martínez, Polaco y Lolo Soler por la B. Linense y a Migue García y Josete por el Cádiz.

GOLES: 0-1 Kike Márquez (3'), 1-1 Carlos Guerra (23'), 2-1 José Ramón (p.) (86').

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la 14ª jornada del Grupo IV de Segunda B disputado en el estadio Municipal de La Línea ante unos 4.000 espectadores.

CRÓNICA: La Real Balompédica Linense y el Cádiz CF han disputado un intenso derbi que finalmente ha caído de lado del conjunto local, que transformó un penalti en el tramo final del encuentro, lanzamiento que supuso el tanto de la remontada.

De nuevo sucedió lo que viene pasando en los últimos derbis entre cadistas y balonos: el que marca primero pierde. La diferencia es que en esta ocasión fueron los amarillos los que marcaron pronto. Además, tuvieron en su mano dar el mazazo con el segundo gol, pero el balón de Airam se estrelló en el palo. Fue un arranque trepidante para los cadistas.

Inicio fuerte de los amarillos

El Cádiz CF arrancó el partido con mucha intensidad y llevando la inercia del juego. En el primer minuto una falta colgada a la espalda fue mal rematada por Airam, pero ése era el primer aviso. Apenas dos minutos después los cadistas inauguraron el marcador en una rápida contra llevada por los dos extremos: Miguel y Márquez.

El jiennense entró por la derecha como un puñal y al llegar a la línea de fondo dio el paso atrás, que fue aprovechado por el sanluqueño para fusilar con potencia en el borde del área pequeña.

El conjunto local no reaccionaba, a pesar de intentar sacudirse la presión con estériles circulaciones de balón en la medular. A raíz de una pérdida de los blanquinegros llegó otra clara ocasión para los cadistas: Márquez progresó por la banda izquierda y sirvió un balón medido a Airam, que éste cabeceó al palo. Por poco aumentó la ventaja el Cádiz.

La Balona empató en la primera aproximación

Los locales establecieron la igualada en la primera acción de peligro que tuvieron. Corría el minuto 23 cuando un centro por la derecha de Juampe fue cabeceado en el segundo palo por Carlos Guerra. Aulestia tocó el balón, pero no lo suficiente para evitar el tanto.

El Cádiz CF pareció no acusar el golpe y seguía imponiendo su calidad en la medular, aunque sí es cierto que las fuerzas se nivelaron, ya que los locales comenzaron a practicar ese juego intenso y peligroso que les caracteriza.

Emoción e intensidad hasta el descanso

Los amarillos estaban bien plantados sobre el terreno de juego y dando siempre una gran sensación de peligro en la mayoría de las acciones de ataque; mientras que la Balona se metió de lleno en el envite gracias al tanto de Guerra.

Así las cosas, el derbi tenía todos los ingredientes para no defraudar y el encuentro llego en tablas al descanso. Demasiado premio para los locales, ya que los amarillos tuvieron ocasiones suficientes para llevar algún tanto más.

Una persistente lluvia aparece en el segundo acto

El partido seguía intenso en la reanudación, con dos equipos que peleaban cada balón al máximo, pero con un condicionante más que añadía incertidumbre al juego: la lluvia. Primero fina y luego más persistente el agua hacía que el terreno de juego, de superficie artificial, se pusiese aun más rápido.

La circulación de balón comenzaba a ser segundaria ante los golpeos indiscriminados de las defensas, con miedo a las pérdidas en la medular, que siempre originaban peligrosas contras.

Se mueven los banquillos en el tramo final

Tanto Rafael Escobar como Antonio Calderón movieron sus banquillos durante el transcurso de la segunda mitad del partido con el objetivo de darle frescura al juego, que comenzaba a detenerse con asiduidad por las numerosas faltas tácticas.

El penalti, con poco tiempo de reacción

El central amarillo se vio recortado en una rápida contra por Óscar Martín y el colegiado decretó pena máxima al apreciar el contacto. José Ramón ejecutó la pena máxima y no falló, aunque Aulestia acertó el lado.

Con el tiempo cumplido el juego estuvo detenido durante varios minutos porque Garrido y Lolo Soler, meta local, chocaron. El mediocentro vasco tuvo que ser sustituido por Arregi, ya que el golpe en la cara lo dejó noqueado. El meta local, por su parte, quedó tendido por un golpe en el costado y el juego tuvo que estar detenido hasta que se recuperase, con el lógico desconcierto en la parroquia local.

En la prolongación se jugó bien poco y en esta ocasión el Cádiz no pudo cantar gol sobre la bocina. Debió hacerlo al principio del partido, cuando lo tenía de su lado para dejarlo casi sentenciado, ya que el control de los amarillos en la primera parte fue total, idea para haberse llevado un partido que cambió demasiado en el segundo periodo.

Fuente: cadizcf.com

Vídeo: carranza10